Bajan las temperaturas y es hora de sacar del armario abrigos y paraguas para protegernos del frío y la lluvia que nos acompañarán durante los próximos meses.


Pero hay zonas de nuestro cuerpo que a menudo quedan expuestas a las inclemencias del tiempo y sufren las consecuencias del viento y el frío, como las manos y la cara, principalmente los labios.


La piel de los labios es especialmente fina y delicada, además de contener menos cantidad de agua que otras zonas del cuerpo. Esto favorece que se resequen con facilidad, provocando tirantez y grietas que, de no tratarse a tiempo, pueden hacerlos sangrar.


Es por ello que conviene cuidarlos y mimarlos para que luzcan sanos y bonitos también en las épocas más frías. No te será difícil si pones en práctica nuestros sencillos consejos.


3 tips para proteger tus labios del frío

  1. Exfoliar.  Al igual que hacemos con nuestro cuerpo para retirar sus células muertas, los labios necesitan una suave exfoliación que les libere de sus capas superficiales, aquellas que ha resecado el frío y los hace lucir apagados. Es fácil realizar su exfoliación frotándolos suavemente con una fina capa de azúcar, preferentemente bajo la ducha, para evitar dañarlos con el roce.
  2. Hidratar. Tras la exfoliación es importante hidratar los labios con productos que los nutran no sólo en su superficie, sino también en sus capas más profundas. En Kneipp hemos creado tres bálsamos labiales de efecto prolongado para un cuidado 100% natural y una hidratación intensa de larga duración que harán tus labios irresistibles: SENSITIVE CARE (con aceite de almendra y cera de candelilla), INTENSIVE CARE (con aceite de semillas de saúco y manteca de karité), EXTRA CARE (con manteca de cupuaçu y extracto de vainilla) y la última novedad, HYDRO CARE. Es recomendable hidratarlos por la mañana y sobre todo por la noche, antes de ir a dormir para que el producto actúe reparándolos mientras dormimos.
  3. Proteger. Sí. Además de la exfoliación e hidratación, los labios necesitan protección. Si ponemos cuidado de realizar los pasos anteriores, protegerlos nos resultará sencillo teniendo en cuenta estos pequeños detalles cotidianos.

Cuidados extra para mimar tus labios

– Bebe lo suficiente. La hidratación comienza en tu interior.


– Evita el tabaco y el alcohol. No son buenos aliados para la piel, tampoco para la de tus labios.


– No los humedezcas. Aunque tenemos tendencia a humedecer los labios al notarlos resecos para aliviar la tirantez, este gesto acabará por resecarlos aún más. Tampoco caigas en la tentación de arrancar las pieles muertas o corres el riesgo de dañarlos.


– Usa pañuelos o bufandas para taparlos y protegerlos del frío y el viento directo. Sin duda lo agradecerán.


Estos son nuestros consejos, pequeños detalles que te permitirán lucir unos labios perfectos si los cuidas cada día.


Y tú, ¿quieres proteger tus labios contra el frío?, ¿has elegido ya tu labial preferido?, ¡ponte manos a la obra y pronto verás los resultados!