Combatir el estrés cuando hace calor
Combatir el estrés cuando hace calor
Relajación y sueño

Combatir el estrés cuando hace calor

El calor suele afectar a nuestros estados de ánimo de muchas formas: puede provocar sensación de cansancio, falta de concentración, dificultades para dormir, mala memoria, irritabilidad e incluso agudizar el estrés. ¡Siempre el estrés!


Parece que con el calor todo debería ser relajarse y pasarlo bien, pero eso no es siempre posible: tanto si ya hemos vuelto de vacaciones como si no las hemos empezado o estamos en medio de ellas… por algún sitio acaba apareciendo la amenaza del estrés, que es fácil que se vea agudizado por el calor.


Y es que situaciones como planificar las vacaciones con toda la familia, hacer jornada intensiva, ocuparnos de las labores de algún compañero mientras no está o volver al trabajo pueden ser de lo más estresantes y hacernos sentir débiles y fatigados.


¿Cómo hacer frente al estrés cuando el calor aprieta?

  1. Hidrátate correctamente y no esperes a tener sed para beber. Para ello es bueno que tengas siempre agua a mano. Siempre es mejor que las bebidas azucaradas. Y recuerda que el alcohol deshidrata.
  2. Relaja tu forma de vestir y no uses cinturones, prendas o complementos demasiado apretados, la ropa holgada te hará sentir más a gusto y mitigará el calor.
  3. Practicar ejercicio moderado y a la sombra en las horas de menos calor te ayudará a encontrar de nuevo el equilibrio. Recuerda que en este caso la hidratación es más importante aún si cabe, incluso si practicas la natación.
  4. Intenta dormir mejor. Sabemos que con el calor es difícil, por eso hemos preparado un artículo entero para los que padecen insomnio en esta época del año.
  5. Una alimentación abundante en frutas y hortalizas frescas es lo mejor cuando el calor aprieta, ya que nos aportan líquidos, vitaminas y minerales que nuestro cuerpo necesita especialmente en estos momentos. Ensaladas, gazpachos y macedonias deberían formar parte del menú de cada día.
  6. Si estás de vacaciones o las empiezas en breve, desconecta del trabajo, localiza los elementos que te desestabilizan para evitarlos o integrarlos y, los últimos días, intenta introducir elementos de tu rutina laboral.
  7. Si ya has estás trabajando o vuelves en breve, tómatelo con calma y vuelve a la rutina de forma paulatina: no tienes que hacerlo todo el primer día. Y disfruta del buen tiempo durante los días festivos para seguir haciendo aquellas actividades que más te gustan y que solo son posibles en esta época del año.
  8. Y recuerda que también Stress Balance puede ayudarte cuando el ritmo de vida se vuelve más exigente. Ya que, gracias a su contenido en vitamina B6 , contribuye a la reducción del cansancio y la fatiga, así como al funcionamiento normal del sistema nervioso. También ayuda al rendimiento físico y cognitivo normal en todo tipo de situaciones gracias al extracto de Rhodiola.