relajar tu cuerpo y tu mente y combatir el estrés
relajar tu cuerpo y tu mente y combatir el estrés
Relajación y sueño

5 técnicas para relajar tu cuerpo y tu mente y combatir el estrés

¿Quién no ha sentido estrés en algún momento de su vida? Te levantas, preparas los desayunos, llevas los niños al cole, te vas al trabajo, vuelves a casa después de pasar por el supermercado, preparas la cena mientras terminas con los ‘quehaceres’ del hogar…


Aún no ha empezado el día y ya sentimos que nos falta tiempo para llegar a todo. Llevamos un ritmo de vida acelerado, lleno de obligaciones, compromisos y algún que otro conflicto, que hace que nos sintamos nerviosas, estresadas e incluso agotadas desde primera hora.


¿Qué es el estrés?

El estrés es una reacción de nuestro cuerpo, física y mental, ante estímulos o situaciones que nos resultan tensas, agobiantes y/o amenazantes. Cuando una persona está estresada tiende a sentir agobio, preocupación y agotamiento.


En pequeñas dosis puede ser positivo. Sufrir un episodio de estrés puntual puede resultarnos motivador y ayudarnos a alcanzar alguna meta personal o profesional, como por ejemplo cumplir con un plazo de entrega. Hay personas que sienten que mejora su productividad cuando trabajan “bajo presión”.


Sin embargo, sufrir un estrés continuo puede afectar gravemente a nuestra salud física y mental. De hecho, el estrés puede desencadenar en dolores de cabeza, gastritis, insomnio, o incluso trastornos psicológicos como la ansiedad o la depresión.


Técnicas para combatir el estrés

Aunque es inevitable sentir estrés en algún momento de nuestra vida, es muy importante detectar las situaciones que nos generan ese estado de nerviosismo y aprender a gestionarlas.


Por eso, te proponemos 5 técnicas y hábitos saludables que te ayudarán a reducir los niveles de estrés y sentirte más vital, feliz y relajada.


1. Hacer ejercicio regularmente

Practicar, al menos, 30 minutos diarios de ejercicio aeróbico, como caminar, correr, nadar o hacer bicicleta, te ayudará a oxigenar el cerebro, reducir el nivel de estrés y sentirte más relajada.Cuando practicamos ejercicio físico, nuestro cerebro libera lo que se conoce como ‘hormonas de la felicidad’: La dopamina, responsable de la motivación y el placer; la serotonina, que alivia el estado de ánimo; y las endorfinas, encargadas de la felicidad.


Por eso, practicar ejercicio con regularidad nos genera una sensación de bienestar, felicidad y relajación, reduciendo los niveles de estrés. Además, el deporte también contribuye a controlar el peso, combatir enfermedades cardiovasculares, aumentar nuestra energía, conciliar mejor el sueño, e incluso socializarnos.


2. Relaja los músculos progresivamente

La relajación muscular te ayudará a sentir que la tensión desaparece de tu cuerpo. Lo puedes realizar en cualquier lugar, incluso sentada en tu oficina. Se trata de sentir como cada una de las partes de tu cuerpo se contraen para, a continuación, relajarse y liberarse.Comienza por los dedos tus pies, apriétalos fuerte durante unos segundos y suéltalos.


Continúa por tus piernas, glúteos, hasta llegar a la zona de los hombros y cuello, donde solemos acumular gran parte de la tensión. Relaja también tu cara, la mandíbula e incluso la lengua. Repite el ejercicio varias veces siendo consciente de cada grupo muscular de tu cuerpo.


Esto te tomará tan solo unos minutos, y sentirás un alivio instantáneo de la presión acumulada por el estrés.


3. Céntrate en tu respiración

Controlar la respiración es una de las formas más sencillas para relajarse y también se puede practicar en cualquier momento y lugar. En cuanto sientas una situación de estrés, concéntrate en tu respiración. Simplemente debes sentarte en una silla con la espalda recta y pegada al respaldo, y los pies apoyados en el suelo, manteniendo un ángulo de 90 grados con las piernas.


Deja caer los brazos para que estén relajados y comienza a respirar lenta y profundamente. Con cada respiración debes notar como tu pecho se llena de aire y, a continuación se vacía muy despacio.


Puedes hacer tantas respiraciones como necesites, con los ojos abiertos o cerrados, e incluso de pie si no es posible sentarte en ese momento.


4. Déjate llevar por la música

Escuchar música antes de irte a dormir te ayudará a conciliar y mejorar la calidad de tu sueño. Se trata de escuchar música cuyo ritmo sea igual o inferior a 60 u 80 pulsaciones por minuto, como la música clásica, el jazz o el folk. 


La música puede llegar a incidir sobre el cerebro, enviándole estímulos que favorezcan su relajación, reduciendo el ritmo de nuestro corazón y destensando los músculos. Por eso, siempre que tengas oportunidad, intenta escuchar música. Puede ayudarte incluso a trabajar y ser más productiva, mejorando tu concentración.


5. Dedícate tiempo a ti misma antes de irte a dormir

Dormir entre 7 – 8 horas diarias es esencial para descansar y reponer energías. Pero no solo se trata de dormir mucho, sino que tenemos que conseguir que este descanso sea de calidad.Por eso, te recomendamos que, al menos una hora antes de irte a dormir, desconectes de aparatos tecnológicos como el móvil, la televisión, el portátil o la tablet y te dediques tiempo a ti misma. Limpia tu cara, tus dientes, ponte el pijama, lee un libro o escucha algo de música, tal y como comentábamos anteriormente. Te ayudará a conciliar el sueño y mejorará su calidad y tu descanso.


Si aun así, tienes problemas para dormir, siempre puedes ayudarte de alguna infusión que te ayude a relajarte y o bien de un complemento alimenticio que prepare tu cuerpo para el momento de sueño, como , que contribuye a disminuir el tiempo necesario para conciliar el sueño.


El primer paso para combatir el estrés es ser consciente de cuál es la causa que lo desencadena. Unos hábitos de vida saludables basados en una alimentación equilibrada, ejercicio regular y dormir bien, contribuirán a liberar tensiones innecesarias.